Iniciar un proceso de psicoterapia FAMILIAR suele ser una decisión que moviliza a todo el grupo o sistema familiar. 
La experiencia nos relata lo importante y necesaria que son las relaciones familiares y la pertenencia a un sistema que ofrezca bienestar y salud integral a cada uno de sus miembros. 
La psicoterapia familiar puede ayudar de forma significativa a los miembros de una familia a mejorar su comunicación y, de paso, resolver muchos de sus conflictos más profundos para llegar a mantener relaciones más saludables entre todos.

¿Cuándo buscar ayuda psicoterapéutica?
1. Cuando el grupo o sistema está haciendo una transición de etapa (adolescencia) y la familia se siente atascada o que le faltan recursos o herramientas personales para afrontarla.
2. Cuando la familia experimenta la perdida o fallecimiento de uno de los integrantes.
3. Cuando los miembros de la familia experimentan desencuentros, frustraciones y distanciamientos, desbordada por continuas interacciones violentas parentofiliales o filioparentales, violencia de genero.
4. Cuando toda la familia o alguno de los miembros experimentó un hecho traumatizante: un accidente, caso de violencia o maltrato, un atentado terrorista o un desastre natural.
5. Cuando algún miembro de la familia sufre un trastorno de conducta: alimentaria (TCA), atención (TDA), del aprendizaje, TOC, etc.
6. Cuando alguno de los miembros presentan una enfermedad mental o alguna adicción a drogas, alcohol, al juego, nuevas tecnologías, etc.